Consejos para cambiar la marca de su empresa
Como dijo una vez el famoso dramaturgo irlandés George Bernard Shaw, «El progreso es imposible sin cambio y los que no pueden cambiar de opinión no pueden cambiar nada». La evolución no sólo es inevitable, sino que es vital para el crecimiento. Y en el ámbito empresarial, sin duda es así, sobre todo cuando se trata de la marca de su empresa. Pero una verdadera renovación de la marca es mucho más que cambiar el logotipo o rediseñar el sitio web. Requiere un enfoque holístico.
1. Adoptar una mentalidad más amplia
Para aceptar el cambio, hay que estar preparado para él. Pero también hay que cambiar de mentalidad, estar abierto a un abanico de posibilidades y mirar más allá de lo que parece o suena bien.
Tener claros tus objetivos finales es obviamente importante, pero también debes ser capaz de destacar cuál es el problema que intentas resolver. ¿Cuáles son los puntos fuertes de su empresa? ¿Qué hace que su empresa sea única en el mercado? ¿Y cómo puede comunicar mejor estos puntos de venta a sus clientes?
2. Obtener información práctica
La mejor manera de obtener una instantánea precisa de su empresa es plantear a sus principales interesados las preguntas clave. Los empleados, los expertos del sector y los socios comerciales pueden aportarle información valiosa sobre los servicios, los productos y la identidad de la marca de su empresa. ¿Cuál es la misión de su empresa? ¿Ofrece su empresa un buen valor? ¿Sus productos y servicios siguen siendo relevantes en el mercado? ¿Y su empresa comunica claramente su posicionamiento de marca?
3. Entienda a su cliente y a su competencia
La realización de estudios de mercado (tanto cualitativos como cuantitativos) también es valiosa. ¿Qué hace bien su competencia que su empresa no hace? ¿Qué aprendizajes clave puede extraer de sus propuestas de valor que puedan aplicarse fácilmente? ¿Quién es exactamente su cliente? ¿Qué es lo que más les gusta (o no) de su marca, sus productos y sus servicios? ¿Y puede asegurarse de que su cambio de marca no sólo le permitirá obtener nuevos clientes, sino también retener a los actuales?
4. Iniciar el proceso
Una vez que haya determinado los objetivos a largo plazo de su empresa, haya afinado sus filosofías básicas y haya elaborado algunas estrategias para implantar el cambio, tiene que formular un plan de acción. ¿Cuál es el calendario para aplicar el cambio? ¿Qué personas clave deben participar y tiene a mano todos los recursos necesarios para empezar?
Considere la posibilidad de contratar a un estratega de marketing de marca para que le ayude: puede darle una opinión experta e imparcial directamente, lo que podría ahorrarle tiempo y dinero más adelante.
5. Estaciones de acción
Así que tu cambio de marca está a punto de completarse y estás listo para presentarlo al gran mundo. Pero espere un momento. Durante el prelanzamiento, vale la pena hacerse algunas preguntas clave. ¿Refleja con exactitud la esencia de la empresa? ¿Comunica eficazmente lo que representa la empresa? Y, lo más importante, ¿seguirá siendo relevante con el paso del tiempo?
La aplicación de procesos como las guías de estilo y las preguntas frecuentes ayudará a mantener la longevidad y a garantizar que su marca se mantenga coherente y potente a lo largo del tiempo.
6. ¡Sorpresa! (o no)
Tanto si su cambio de marca es una revolución como una evolución, debe tener en cuenta sus estrategias de lanzamiento comunicando de forma clara y eficaz tanto a los clientes como a los empleados. A la mayoría de los clientes no les importará realmente un nuevo nombre o logotipo; solo querrán saber cómo el cambio de marca va a modificar positivamente sus propias experiencias.
Siga fomentando su confianza expresando claramente que las cosas que les gustan de su empresa seguirán siendo las mismas, pero serán aún más grandes y mejores.
Un ejemplo brillante
Con una planificación cuidadosa y una ejecución inteligente, su organización también puede disfrutar de las recompensas que conlleva un cambio de marca exitoso.